La UEFA aumenta la exigencia del Fair Play Financiero

El Comité de la UEFA, reunido en Kiev, acota las posibilidades económicas de clubes como Manchester City y PSG, cubriendo los vacíos legales que existían hasta ahora sobre el proceder de los Clubes-Estado.

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El Comité Ejecutivo de la UEFA aprobó el jueves, en Kiev, un nuevo Reglamento de Fair Play Financiero que será mucho más exigente en el gasto de los clubs. La especulación en el mercado de fichajes ha provocado una gran inflación en los traspasos de los jugadores. Esta subida del valor de los futbolistas se ha incrementado de forma espectacular en los últimos meses. El fichaje de Neymar por el PSG acabó de romper el mercado. 222 millones pagó el equipo francés por el brasileño, que jugaba en el Barcelona. A partir de ahí, llegaron otras locuras del mercado: Kyilian Mbappé (al PSG por 180 millones), Philippe Coutinho (al Barca por 160 millones) o Ousmane Dembélé (al Barca por 140 millones).

La UEFA ha establecido que no aceptará un desequilibrio de más de 100 millones en la campaña de fichajes. En este caso, la UEFA puede verificar inmediatamente y pedir garantías sobre el cumplimiento del juego limpio para el año siguiente. Ejemplo: el PSG, después de la compra de Neymar (pagó 222 millones de euros), si hubiera tenido un desequilibrio superior a 100 millones, debería haber ofrecido inmediatamente garantías, o de lo contrario, la UEFA no hubiera permitido la transacción y hubiera seguido en el Barça.

En las nuevas obligaciones, el juego limpio económico también prohibe las falsas cesiones como la del Mónaco al PSG en el caso de Kylian Mbappé por que que deberá pagar 180 millones al término de la presente temporada, pero que no entrará en el balance de ésta. Si el club galo intentara a partir de ahora hacer una operación así seria contabilizada como una contratación que tendría repercusión desde el momento de la llegada del jugador a préstamo, no como una cesión que sólo impacta en las cuentas del club cuando se consuma el fichaje.

Tampoco se podrá incorporar en el balance ingresos futuros por ingresos de Champions o Europa League. Los clubs estarán obligados a publicar en su web los balances y el dinero dado a los intermediarios en todas las operaciones. El Real Madrid deberá precisar qué representantes se llevaron comisiones, por ejemplo, en el fichaje de Vinicius Junior cuando éste llegue al Real Madrid.

Los puntos nuevos del Fair Play Económico de la UEFA son los siguientes:

Obligación de transparencia. Obligación para los clubs de publicar en sus respectivos sitios web oficiales los presupuestos y balances, así como los gastos y las comisiones para los intermediarios.

Limitar el déficit y controles inmediatos. Un desequilibrio de más de 100 millones entre lo gastado y lo ingresado no se permitirá en la campaña de adquisiciones. En este caso, la UEFA puede verificar inmediatamente la operación y pedir garantías sobre el cumplimiento del FPF (Fair Play Financiero) para el año siguiente. En caso de no cumplir las obligaciones, se podría bloquear el fichaje.

Adiós a las cesiones ficticias. No se permitirá la compra de un jugador fingiendo un préstamo y en las cuentas deberá presupuestarse como una compra y así deberá figurar en su balance.

Evitar fraudes con clubes satélite. No se permitirá vender un jugador a un club colaborador o dependiente para así poder registrar un activo falso en el balance. El precio de compra original se ingresará en el balance y no el precio que se establezca por el traspaso al club filial.

Balances reales y no con ingresos ficticios a futuro. No será posible anticipar los beneficios por participar en la Champions League o Europa League antes de que se juegue el torneo. Un equipo clasificado a la Champions no puede contabilizar como ingresos el dinero que en un futuro reciba por su participación en lla.

Control de deuda. Habrá un control más estricto sobre la deuda de los clubs, mientras que hasta ahora el juego limpio se basaba solo en el déficit presupuestario. Una novedad a tener en cuenta. No sólo se fijará en el control de déficit en el balance, en el equilibrio entre el gasto y los ingresos, sino que ahora se ocupará de ver si existe déficit global en el club, en sus cuentas.