El Madrid consiguió el primer punto de la semifinal de Liga ACB al vencer al Herbalife Gran Canaria 88-70. Después de dominar el primer cuarto los visitantes se chocaron con la realidad y nada pudieron hacer ante la profundidad de la plantilla blanca. Tavares, Carroll y Reyes lideraron a una buena actuación coral. Después de un primer cuarto soso por parte de los locales, el Madrid realizó un gran encuentro con defensa, triples, jugadas espectaculares y despejó cualquier duda para que no saltara la sorpresa en el Wizink Center. El martes segundo partido de la serie a las 21 horas.
Recibió Laso el trofeo al mejor entrenador de la temporada, galardón otorgado por la asociación de entrenadores. En cuanto al partido, el Madrid salió como en otras ocasiones a lo largo de la temporada. Muy frío. En un abrir y cerrar de ojos los canarios se pusieron 2-11 con un tiempo muerto de Laso de por medio. Entre Radicevic y Fischer destrozaban la defensa blanca ante la impotencia del Madrid. Entre tanta apatía lo más destacado fue un espectacular conexión en forma de alleyoop de Taylor facilitado por Doncic. A pesar de la garra de Felipe, que no encontraba acompañamiento en el resto del equipo, el capitán no podía hacerlo todo. Si Felipón cogía rebotes ofensivos, los canarios hacían lo mismo en la otra canasta. Las entradas de Rudy y Llull no dan tiempo a comenzar la remontada. La defensa del Herbalife ese primer cuarto sobresaliente todo hay que decirlo. El 14-22 indicaba la realidad terminados los diez primeros minutos.
Pero la historia cambiaba claramente en el segundo cuarto. Tres nombres a destacar. Carroll, Rudy y Llull. Sin olvidar el trabajo oscuro que hace Radoncic desde el puesto de ala-pívot. Grandes minutos del montenegrino en el segundo período. Entre el trío anteriormente citado consiguen 24 puntos, liderados por los 10 de Carroll. La defensa del Madrid se pone las pilas y la frescura y descaro que mostraban los canaros se va diluyendo según pasan los minutos. Este segundo cuarto es claramente dominado por el Madrid y a partir del minuto 15, ya se ponen por delante del marcador por primera vez en el partido tras una clásica bombita de Carroll (31-30). A pesar de no tener un gran porcentaje de triples al descanso (27 %) esos triples anotados se convierten en momentos claves para la remontada. Al final tras ese 25-10 de parcial en el segundo período se marchan los dos equipos al descanso con el 42-32. Al Herbalife le viene hasta bien que termine el cuarto ya que la inercia era claramente blanca e iban embalados hacia la victoria.
Con un 7-0 en tromba vuelve a la pista el Madrid provocando otro tiempo muerto de Casimiro. Tras triple de Causeur se consigue la máxima ventaja blanca con el 52-34. Los canarios se ven impotentes ante lo que se le viene encima. Tras ese más 18, el Herbalife solo consigue rebajar a 13 puntos la desventaja. La seriedad con la que ya se toma el encuentro el Madrid, la defensa, la circulación de balón, unido a jugadas espectaculares como otro alleyoop de Tavares de nuevo facilitado por Doncic, todo funciona en el Madrid. Quizá el único pero son los fallos en el tiro libre. Los blancos se marchan al finalizar los treinta minutos venciendo 62-49.
En el último cuarto, sobretodo intercambio de canastas. El Madrid remató un gran partido con triples, defensa y además se siguió viendo una gran actuación de Tavares que siguió confirmándose como el hombre del partido. El Herbalife lo intentaba pero la profundidad de la plantilla blanca era demasiada para los canarios. Al final victoria 88-70 presentando al Madrid sus credenciales no solo como candidato para la final sino como candidato para el título de liga.
