Palo muy duro el que reciben los Cachorros de Manolo Díaz. El Castilla se sintió victorioso durante muchos momentos, pero la historia se repitió y el primer filial madridista sufrió una nueva remontada a domicilio a pesar de ponerse 1-3 : la asignatura pendiente, los goles encajados lejos de la Ciudad Real Madrid. El Fabril fue capaz de dar la vuelta al resultado logrando un 4-3 final que fue tan duro como ilegal por anotarse en fuera de juego.
El Castilla era plenamente consciente de la importancia del partido, especialmente al ser el único equipo que jugaba el sábado. Ganar o empatar suponía ponerse líder pero los jugadores del Real Madrid nunca van a por la opción fácil y plantearon el partido con un único objetivo en mente: sacar 3 puntos para dormir líderes y asegurarse, en el peor de los supuestos, un co-liderato.
Todo ello se veía en cada minuto disputado en la Ciudad Deportiva Abegondo, y en la actitud mostrada durante el primer tiempo, tanto que a los quince minutos los Cachorros ya habían logrado el objetivo más difícil: abrir la lata. Manu Hernando aprovechaba un centro de Fidalgo tras un saque de esquina para mandar el balón a la jaula, poner a su equipo por delante, y estrenarse como goleador en la presente temporada.
El gol sentó muy bien al Castilla que tuvo oportunidades de aumentar la diferencia, la mayoría con protagonismo de Cristo y Franchu. Sin embargo, en una jugada aislada puntual, un disparo duro de Víctor supuso el tanto del empate. Luca llegó a tocar el complicado disparo pero no acertó a despejarlo correctamente. Pero el Castilla no había dicho su última palabra dentro de este primer acto y en un libre directo señalado con gran acierto por el colegiado (clara falta aunque lejos del balón), Cristo anotó su sexto gol con un disparo inapelable al palo del portero que también dejó dudas en la acción. Independientemente de ello gran merito del tinerfeño.
El segundo tiempo comenzó con una dinámica algo diferente con un Castilla más agazapado y un Fabril más incisivo volcando su juego ofensivo en la figura de One y haciendo presagiar lo peor. Los locales dieron varios sustos al equipo de Manolo Díaz, que por fortuna, no resultaron reflejados en el marcador. Unos minutos después y tras Quique sufrir molestias que casi le hacen abandonar, el propio capitán del Deportivo Fabril anotó en propia meta un centro medido de De Frutos para Cristo. Los fantasmas del pasado que sobrevolaban la Ciudad Deportiva de Abegondo parecían esfumarse, más cuando el propio Cristo casi hacía el cuarto gol salvado por el meta local tras un remate picado con la testa.
La diferencia de dos goles, a la vista del estado moral de los gallegos, parecía diferencial. Y más viendo como los Cachorros de Valdebebas aplicaban un plus de diligencia defensiva recordando el encuentro ante el Salmantino. Y cuando el arreón local parecía que se frenaba tras anular todas las acometidas de Uxío, suplente hoy, pero muy incisivo y luchador, el Deportivo Fabril dio la vuelta al electrónico con dos tantos consecutivos tras la entrada de May al terreno de juego. Los dos anteriores apelados fueron los autores.
Lejos de bajar los brazos, los pupilos blancos dieron muestra de que son un equipo que compite en los momentos más duros, y tras ello se volcaron en la portería local. Pedro López brilló nuevamente deteniendo balones imposibles a un Cristo que sigue de dulce.
Pero cuando parecía que los gallegos no podían aportar más al juego ofensivo de su equipo, una jugada a balón parado en la que Seoane estuvo algo lento regresando del fuera de juego, supuso el gol de la remontada que entró con mucho dolor. Tras revisar las imágenes, el gol parece ser fuera de juego pero un aspirante a liderar el grupo no puede ver como en dos salidas consecutivas no gana aún anotando tres goles en cada encuentro. Independientemente de los méritos rivales que por un momento parecía que se habían inspirado de la grandeza del Real Madrid para lograr dicha gesta.
Hay mucho trabajo que hacer para el renovado cuerpo técnico blanco ya que no pueden volver a sucederse este tipo de partidos: el Castilla ha perdido una oportunidad de oro y abandona La Coruña tocado. Toca pensar en el encuentro ante el Sanse y esperar al resto de resultados antes de sacar más conclusiones.
