El Madrid obtuvo una fácil victoria ante el Khimki liderados por Causeur que metió 22 puntos en 25 minutos. Hasta 8 jugadores consiguieron más de 10 de valoración evidenciando la diferencia entre ambos equipos. Solo un detalle en cuanto a la valoración. El Khimki al final del partido logró 52, el Real Madrid 137. No hay más que comentar. Como dijimos en la previa, no hay color. Solo dieron la cara Shved, Markovic y Thomas. El Madrid muy superior y afianzando su posición de cara a los playoffs. Segunda semana seguida consiguiendo al menos 100 puntos en Euroliga. Tavares en el aspecto defensivo y Llull en tareas más oscuras y dedicadas al colectivo también importantes en la victoria blanca.
Los blancos sorprendían en el quinteto titular con la aparición de Thompkins recuperado ya de su lesión. En cuanto al partido, el Khimki, dispuesto a dar guerra desde el principio, no demostraba su actual puesto en la Euroliga. Con un Shved en plan dominador le plantó cara al campeón del torneo mientras que en los primeros minutos fue Carroll quien le daba la réplica y en momentos puntuales el Madrid sobrevivía gracias al triple. Lo que pareció un buen arranque por parte de los locales fue sofocado relativamente pronto por los de Laso. Una vez ajustada la defensa sobre Shved el equipo ruso no se vino abajo pero ya no tenía esa frescura de los primeros minutos y empezó a fallar tiros. Sobrevivía pero ya el Madrid tomaba tímidamente la iniciativa. Solo Markovic parecía estar dentro del partido cuando Shved estaba en el banco. Con el 22-24 se llega al término del primer cuarto.
Con la entrada de la segunda unidad en el segundo período, en especial Causeur, comienza su noche fuerte y la diferencia se va afianzando en torno a los 7-9 puntos (31-40 minuto 16, con Causeur encestando 8 puntos). Por los rusos, Shved era el que lideraba al Khimki junto a Thomas. No obstante, el ruso aunque acabaría con 21 puntos terminó con 5/14 en tiros de campo. La defensa blanca se hacía notar. Taylor primero y Causeur después hicieron un buen trabajo en ese aspecto. Se iban al vestuario los 2 equipos con la victoria momentánea blanca 38 a 51.
En el tercer cuarto, los rusos intentaron infructuosamente la remontada (50-58) pero la diferencia era más amplia de lo que el marcador reflejaba en ese momento mediado el tercer cuarto. El Madrid rompió las esperanzas rusas con un parcial de 17-0 entre el tercer y último cuarto y dio otro puñetazo en la mesa presentando nuevamente las credenciales, aunque el partido de la semana pasada fue más importante. Causeur vio una gran oportunidad para lucirse y la aprovechó ante Shved que sí dio muestras de su calidad pero no lo suficiente para marcar la diferencia.
Lo más importante de todo es que el Madrid asegura el factor cancha quedando 3 partidos para terminar la fase regular a la espera de su rival en cuartos de final de playoffs.