De La Rosaleda al primer año sin entrar en Europa

En la temporada 76-77, el Real Madrid se quedó por primera vez en su historia fuera de las competiciones europeas. El equipo entrenado por Miljanic certificó su fracaso en la última jornada, perdiendo en Málaga

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Juanito, aún en el Burgos, se presta a disparar ante la mirada de Benito, Sol y Miguel Angel.
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Las visitas madridistas a La Rosaleda han tenido dos periodos muy diferenciados motivados por un dato curioso: la denominación oficial del conjunto local. El CD Málaga fue el nombre que tuvo el equipo desde 1941 hasta su disolución en 1992, acuciado por las deudas. Durante ese periodo jugo 20 temporadas en Primera División en las cuales el Real Madrid tan solo consiguió ganar en siete visitas por cuatro empates y nueve derrotas. Sin embargo, tras la reconversión del filial Atlético Malagueño y su transformación en Málaga CF a partir del ascenso de 1999, el Madrid tan sólo ha perdido un partido de los 16 ligueros jugados en La Rosaleda. Del periodo del Málaga original, vamos a quedarnos con la visita a la Costa del Sol en la ultima jornada de la temporada 76-77, donde el Real Madrid confirmó un hecho histórico que solo ha sucedido dos veces en toda su historia: la no clasificación para competiciones europeas.

La ultima jornada liguera estaba prevista para el 22 de mayo. El Madrid viajaba a Málaga aturdido aún por el derbi de la semana anterior, donde el Atlético de Madrid se había proclamado Campeón de Liga en el mismo Bernabéu tras empatar 1-1 y gracias, ya que el gol madridista llego por una ‘pase’ involuntario del rojiblanco Capón a Roberto Martínez, quien no desperdicio el regalo. Con estos ánimos, el Madrid se jugaba el clasificarse para Europa en la ultima jornada en medio de una tarea utópica: tenía que ganar y esperar el tropiezo de los seis equipos que le precedían en la clasificación. Matemáticamente era posible lograrlo, pero siendo racionales era una gran quimera el conseguirlo. Enfrente, un rival como el Málaga, que en esos momentos ya estaba descendido por lo que el partido apenas tenia interés real para el devenir de la clasificación. Pese a todo el publico estuvo a punto de llenar La Rosaleda, en parte por la visita blanca y en parte por el homenaje que se tributaba a dos jugadores malacitanos que se retiraban: Monreal y Fidel Uriarte.

Santillana, en el suelo, tras marcar el único gol madridista en La Rosaleda.

El partido no tuvo mucha historia y se vió un reflejo del Madrid que había jugado esa temporada con un continuo quiero y no puedo. El Málaga, sin hacer muchos esfuerzos, se puso por delante primero por medio de Orozco y mediada la segunda parte por medio de Juan Carlos colocaba el 2-0 en La Rosaleda. Puede que esto y el verse haciendo el ridículo ante un descendido hiciera que el Madrid se estirara para conseguir acortar distancias. Lo logró por medio de Santillana, de cabeza cómo no, a falta de diez minutos para terminar el partido, y se puso a colgar balones al área con la esperanza de empatar. Finalmente se consumaba la tragedia y la derrota por 1-2 dejaba al Real Madrid sin ningún título y quedando fuera de la competiciones europeas por primera vez desde la creación de las mismas. Algo histórico y que a día de hoy solo se ha sucedido una vez mas. Visto el equipo que jugó en Málaga (Miguel Ángel, Sol, Benito, Pirri, Del Bosque, Aguilar, Guerini, Jensen, Velázquez y Roberto, mas los cambios de Santillana y Uría), ¿como fue posible ese año horrible? Pero sí, sucedió.

Una temporada para el olvido

Esa temporada 76-77 trajo la salida del club del alemán Günter Netzer, tras tres temporadas, pero sobre todo la despedida de dos símbolos y capitanes del Real Madrid: Amancio Amaro y Ramón Grosso. Junto a ellos también abandonaron el club Junquera, Jose Luis, Touriño, Corral, Heredia y Morgado. Muchas salidas, pero a cambio Bernabéu apenas hizo desembolso, sobre todo porque el equipo venía de ganar la Liga, y unicamente tuvo relevancia el fichaje del danés Jensen, a los que se sumaron las subidas del filial de San José y Escribano. Aun así, a mitad del mes de Julio, cerca de 15.000 personas recibieron al equipo en la presentación oficial en Chamartín.

Once madridista en el Teresa Herrera 76-77.

La pretemporada es triunfal. Se obtiene en Coruña el Teresa Herrera tras ganar 5-2 al Peñarol de Montevideo y 2-0 a los brasileños del Cruceiro; en Málaga el Trofeo Costa del Sol goleando nuevamente el Peñarol por 4-0 y al Málaga por 0-3; el Ciudad de Almansa, jugado en las mismas fechas que el Costa del Sol aunque con un equipo de suplentes y algunos jugadores del Castilla, al Albacete y al Almansa por sendos 0-2 y se finaliza con una mini-gira por Dinamarca donde se empata 2-2 con el Aalborg y se derrota 4-5 al Odense. La presentación oficial ante la hinchada madridista se produce con el partido homenaje a Grosso, quien el ultimo día de agosto jugará unos simbólicos minutos para retirarse del fútbol profesional ante el Slavia de Praga, al que se derrota por 4-1 con un Jensen en plan estrella haciendo un triplete. Apenas cinco días mas tarde comenzaba una Liga donde el Madrid se las prometía muy felices.

El Madrid inicií la Liga en septiembre con altibajos. Tras una victoria en El Helmántico con un solitario gol de Breitner, el mismo día que en la Asamblea del club Bernabéu era ratificado como presidente por cuatro años mas, el Madrid encadenó dos derrotas seguidas: en casa 2-3 ante el Athletic Club y en el Camp Nou por 3-1, para acabar el mes recuperando fuerzas y goleando en Chamartín al Hercules por 4-0. Entre medias tuvo lugar el debut europeo en Polonia, donde se venció al Stal Mielec por 1-2 en un partido que acabó jugadonse en penumbra dado que llegó la noche y el estadio no disponía de luz artificial. La vuelta tuvo lugar en el destierro de Valencia, y es que pendía una sanción sobre el Real Madrid desde la temporada anterior, cuando el llamado Loco del Bernabeu saltó al césped tras el Real Madrid – Bayern de Múnich y golpeó tanto al arbitro como al delantero germano Muller. Entre octubre y noviembre aparece una mala racha para los blancos, amén del mazazo europeo. Hasta la ida de los octavos de la Copa de Europa, el Madrid había empatado en Sevilla y derrotado por la mínima al Burgos, casi pidiendo la hora. En el nuevo destierro europeo, esta vez en Málaga, el Madrid empata 0-0 con el Brujas en un partido donde Miguel Ángel, Camacho y Rubiñán, junto al público de la Rosaleda, fueron los mejores del partido, con lo cual se puede uno hacer una idea de como fue el encuentro. Antes de la vuelta, el Madrid cambia la cara y logra derrotar el Zaragoza 2-4 en La Romareda y vencer en Chamartín a un Valencia líder por 2-0. En Brujas el Madrid volvió a ser Mister Hyde y sin juego y con mala suerte acabo derrotado por 2-0. Cuando parecía que podía contrarrestar el gran juego belga llego el primer gol, y poco después Rubiñán se metió otro en propia puerta. Benito se lesionó con los cambios ya realizados, Jensen tuvo un remate al palo y al menos Miguel Ángel detuvo un penalti, pero estaba claro que no era la noche madridista.

Barro y agua hasta los tobillos en el barrizal de Balaidos: Camacho y Sol se retiraron así a vestuarios.

Tras la eliminación el Madrid encadena una única victoria en cinco partidos. En Vigo, en medio de un barrizal indigno para jugarse un partido, el Madrid pierde 2-0; en casa se empata a 2-2 con la Real Sociedad, se cae estrepitosamente en Sarria por 4-1, se golea 5-2 al Elche y se vuelve a perder 2-0 en el Benito Villamarín. Miljanic llegará a quejarse amargamente al final de la temporada de este periodo en el cual el Madrid encadena lesionados por doquier. Se podría argumentar como excusa, pero resulta difícil cuando la plantilla era básicamente la misma del año anterior que obtuvo el Campeonato liguero. El Madrid se recupera derrotando a Las Palmas por 3-0 y, pese al mal juego y las dudas, se coloca a tres puntos del líder, por lo cual existía posibilidad real de recuperación. Sin embargo el tramo final de la primera vuelta y el comienzo de la segunda es nefasto: una victoria en seis partidos, entre ellos varios sin vencer a los equipos de cabeza. En el Calderón sale goleado por 4-0 al igual que en Bilbao por 4-2 para posteriormente ante el Barça en Chamartín, empatar 1-1 jugando mejor que los barceloneses pero con tan mala suerte que llega un gol fantasma de Del Bosque que el arbitro no valida. Con tanto infortunio, el Madrid se sitúa a ocho puntos del líder, un abismo teniendo en cuenta que las victorias aun valían dos puntos.

Los altibajos se suceden en los resultados. Se vence en Alicante para a continuación empatar en casa con el Sevilla, con la bronca del publico y gritos de «fuera, fuera» durante el partido; se visita El Plantio y se toca fondo en el barrizal que es el campo, perdiendo 3-2 con una actuación estelar de Juanito, que por aquel entonces ya había firmado con el Real Madrid para la siguiente campaña. Apenas dos días después, el Madrid se estrena en la Copa del Rey en Alicante y el resultado no puede ser peor: derrota por 3-0. Si el rumor de que Miljanic no iba a seguir el siguiente año ya llevaba días, éste se transforma  en que igual no termina ni la temporada. Para acallar todo esto sale el propio entrenador a indicar que él no dimitirá y Bernabéu le ratifica diciendo que Miljanic tenia contrato y lo cumplirá aunque le cueste la vida. También da un paso al frente y reclama que los aficionados le echen la culpa a él por ser el máximo responsable y ya comienza a reconocer abiertamente sobre la posibilidad de no lograr jugar en Europa el año siguiente.

Juanito, aún en el Burgos, se presta a disparar ante la mirada de Benito, Sol y Miguel Angel.

Para la vuelta de Copa se piensa en la remontada, pero los dos goles de Pirri no son suficientes y el Madrid cae eliminado ante el Hércules en un Bernabéu casi lleno. Cuatro días después, el Madrid vuelve a empatar 0-0 en casa ante el Celta en un partido tan malo que hasta Del Bosque llega a decir que parece que los jugadores blancos ni se conocen y Santillana comenta que el equipo juega con once sistemas distintos. Con este ambiente tan enrarecido, se aprovecha un parón de la Liga por la selección para jugar el Torneo del 75º Aniversario del Real Madrid, que resulta un fiasco en cuanto a fútbol y también de público.: la gran final entre el Real Madrid y la selección Argentina no congrega ni a 15.000 personas en el coliseo del Paseo de la Castellana.

El tramo final no mejora nada. Se pierde en casa ante el Betis por un solitario gol y en Las Palmas sale goleado por 4-2. A falta de tres jornadas esta fuera de los puestos europeos y con seis equipos por encima suya. Con este panorama el estadio esta prácticamente vacío, apenas 5.000 irreductibles están presentes, con la visita del Racing de Santander al que se derrota por 3-1. Las dos restantes jornadas son las mencionadas del alirón rojiblanco y la visita a Málaga donde se consuma la tragedia. El Madrid se quedaba fuera de Europa.

La temporada sin embargo no se cierra aun y es que pese al mal año el tirón del Madrid seguía siendo grande, por lo que tenia firmada una mini gira por México. Allí el Madrid jugara entre mayo y comienzos de de junio tres partidos ante Atlas, Pumas y Monterrey que se saldan con dos empates y una victoria. En esos partidos debutara con la camiseta blanca el genio de Fuengirola, Juanito, que será, junto a Stielike y Quique Wolff, uno de las grandes caras del Madrid de la siguiente temporada. Pero eso ya es historia para otro día.

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Con mi Insignia de Plata en un lugar privilegiado e intentando llegar a la de Oro, nada se puede comparar a la 7ª cuando uno ha sufrido todas las decepciones europeas de la segunda mitad de los 80. Abuelo, lo que hubieras disfrutado con los 11 de blanco, ya tenemos el doble de Copas de Europa desde que te fuiste y aquí seguimos, disfrutando y recordando a todos aquellos que de una u otra manera han hecho posible que seamos lo que somos.