Portugal planteó el partido con la idea de contener la pelota y circularla con calma hasta encontrar el hueco de Irán. El combinado iraní arrancó con la misma idea de encuentros anteriores: primera parte con muchos hombres por delante del ataque portugués para cerrar espacios e intentar marcar al contragolpe o balón parado. El plantel de Queiroz plasmó a la perfección el guion ejecutado contra España. Portugal tuvo hasta el 70% del esférico durante el primer tiempo, pero las ocasiones no acababan llegando más que con disparos lejanos de Cristiano Ronaldo que atajaba el meta con facilidad. Beiranvand comenzó muy nervioso, cediendo segundas oportunidades que no aprovecharon los portugueses para marcar.
El primer tiempo llegaba a su fin con Irán inquietando la meta de Rui Patricio con libres directos y balones colgados al área en jugadas a balón parado. Sin embargo, sería el combinado luso quien se adelantase en el marcador gracias a una buena combinación entre Joao Mario y Quaresma que ejecutaba este último con el exterior internándose en el área grande por el vértice izquierdo de Beiravand para poner el cuero en la escuadra opuesta. Un gol de muchos quilates que ponía líder a Portugal.
Soñe con este gol de Quaresma pic.twitter.com/FwNFIeD03O
— Yeison Molina (@Yeizombiee) June 25, 2018
Cristiano da vida a Irán
En la reanudación, la selección lusa continuó buscando a la estrella del Real Madrid en cada uno de sus ataques, aunque el ‘7’ se encontraba muy solo en ataque con André Silva desaparecido. A pesar de ello, Cristiano Ronaldo encontró oro al señalar el VAR un penalti que el colegiado no vio oportuno indicar en primera instancia. La repetición cambió la perspectiva de Enrique Cáceres, demostrando que la decisión de los árbitros queda supeditada al VAR, ya que señaló una pena máxima que, a juicio de un servidor, no existió. Justicia divina o acierto del meta iraní, el penalti ejecutado por Cristiano no subió al marcador.
Espoleada por la necesidad de un gol que le permitiese seguir con opciones, Irán fue volcándose en ataque paulatinamente, robando el cuero y saliendo al contragolpe a una selección que se iba desesperando por momentos. Quaresma se tomó la justicia por su mano ante las faltas iraníes y vio la amarilla. Fernando Santos le retiró para evitar un mal mayor, dando entrada a Bernardo Silva… pero ni así resucitó Portugal. El equipo luso fue viendo cada vez con mejores ojos el resultado, que le dejaba primera refrendada por la derrota de España. Sin embargo, el VAR está dando al mundial el juego que no ponen algunos combinados y tiró de omnipotencia, pues prácticamente a la vez, concedía un gol legal a España que de otra manera no hubiese subido al marcador, y concedió un penalti (esta vez sí lo era) a Irán en el tiempo de descuento. Ansarifardi sí que lo aprovechó, poniendo las tablas en el marcador y dejando en bandeja el liderato del grupo a España. Tuvo incluso el equipo iraní la oportunidad de lograr la gesta pero Taremi envió el esférico al lateral de la red. Portugal, segunda, se medirá a Uruguay.
Ficha del partido
