OBR 73 – 86 RMB: El Madrid sigue lanzado

Un gran actuación colectiva derrotó al Monbús sin opciones a partir del segundo cuarto. Quinta victoria consecutiva que le mantiene líder en la ACB y semana tiunfal en siete días dificilísimos

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El Real Madrid continúa líder de la Liga ACB al vencer cómodamente en Santiago por 73-86 al Monbús Obradoiro en un partido que se rompió a partir del segundo cuarto. Después, los blancos controlaron con oficio el encuentro. Buen juego colectivo en el que se puede destacar a Campazzo, Deck, Reyes o Yusta entre otros. Por los gallegos, los mejores fueron Brodziansky y Obst.

Les costó a ambos equipos entrar en juego ya que aunque el ritmo era frenético el desacierto sobretodo en el triple era muy alto en los primeros minutos. Se llegó a acumular una estadística de 0/9 entre los equipos. Pero poco a poco cogieron las riendas varios protagonistas. Por los gallegos Vasileiadis y Brodziansky. Randolph y Yusta por el Madrid. Después del empate a 13, un parcial blanco de 10-0 incluyendo una falta antideportiva gallega muy discutida. En un abrir y cerrar de ojos con una aparente facilidad el Madrid se iba del partido. Pero el Monbus no iba a quedarse con los brazos cruzados. A pesar de unas buenas defensas blancas pudieron rebajar un poco la diferencia y quedarse con el 19-26 al final del primer cuarto.

Apenas comenzado el cuarto y en plena vorágine anotadora, Carroll anota su triple 700 en liga ACB, todo un hito. En esa borrachera de puntos el Madrid consigue un parcial de 12-2 sin respuesta por los gallegos. A pesar de la rotación de Moncho Fernández, el abuso del triple sin éxito les pasa factura a los locales. Felipe con veteranía y oficio desquicia a De Zeeuw que se va al banquillo con 3 faltas personales. El 23-43 en 14 minutos era un drama para los gallegos. Pero Obst tomó la responsabilidad por el Monbús y con 8 puntos consecutivos da ciertas esperanzas a los gallegos (33-46). Fue un espejismo, el Madrid controlaba el partido y de ahí no bajó la diferencia. Al descanso, los blancos vencían cómodamente 36 a 53 en una buena primera parte ágil en parte por las pocas faltas cometidas sobretodo en el segundo cuarto. Los más destacados eran Brodziansky 10 puntos y Obst con 11 mientras que por el Madrid las valoraciones estaban mucho más repartidas con Randolph y Carroll con 8 puntos cada uno sobresaliendo en tareas anotadoras.

El Madrid seguía el mismo guión de la primera parte y volvía de nuevo a los 20 de diferencia (38-58). El empuje de Nacho Llovet no bastaba. El Madrid con el dominio del rebote, el movimiento de balón que generaba constantes desajustes y la defensa que ahogaba a los receptores se imponía con claridad. A pesar de la diferencia, el Madrid quería más, tenía hambre de victoria (47-65 minuto 28) con Deck jugando buenos minutos junto con Reyes. Los gallegos iban paulatinamente bajando los brazos dando por hecha la derrota. Era un tarea titánica el derrotar al Madrid. La constante rotación de los hombres de Laso imponía mucha exigencia y el Monbús se veía claramente inferior. Al término de los 30 primeros minutos el 52-71 prácticamente daba por cerrado el partido.

Poco a destacar en el último cuarto con los gallegos deseando que se acabara el partido ya que hacía muchos minutos que estaba roto. A pesar de que dejaron la desventaja en 11 puntos (73-84, minuto 38) fue el canto del cisne. Ni les daba tiempo a remontar ni era factible el hacerlo dada la diferencia entre ambos equipos. Buen broche final de una semana a priori muy complicada para el Madrid saldada con tres triunfos en tres partidos. Este equipo está lanzado.

 

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Madridista desde pequeñito, solo podía ser seguidor del mejor equipo del mundo; bastantes desgracias tiene la vida como para llorar por el deporte y ser fan de un equipo perdedor. Como lo mío no era precisamente ganarme las habichuelas jugando al baloncesto, decidí que lo mejor era verlo desde el otro lado de la barrera, y qué mejor forma que narrar los éxitos del Real Madrid de baloncesto. Mis referentes ligados a este deporte, sin lugar a dudas, han sido la plata olímpica de los Ángeles 84, el colegio San Viator (de donde salieron gigantes como Juan Antonio Corbalán y Carlos Jiménez) y mis hermanos mayores. Después de varios trabajos y alguna estancia en Irlanda decidí sentar la cabeza y ahora presto el mejor servicio al ciudadano desde mi posición de funcionario de la Comunidad de Madrid. No cuajó la opción de ser coordinador de cheerleaders, pero os dejo una foto ellas para que veáis que al menos lo intenté...