ROM 1 – 6 JUVA: Poyatos tiene un rodillo

Dos goles de Rodrigo, un arranque tremendo de Miguel Baeza, la voracidad de Pedro y una buena actuación ofensiva arrollan a una Roma que tiene un diamante en bruto: ojo con Alessio Riccardi

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Al Juvenil A del Real Madrid le cuesta arrancar en División de Honor, pero en la Youth League Dani Poyatos ha logrado montar un rodillo que cuenta sus partidos por victorias y que se ha clasificado para octavos de final de la Copa de Europa juvenil como primero de grupo, lo que le garantiza disputar en Valdebebas el encuentro de esa eliminatoria, recordemos que a partido único. Un arranque tremendo de Baeza, el olfato de Rodrigo Rodrigues, la verticalidad de Alberto y el hambre de Pedro fueron demasiado (1-6) para una Roma Primavera que tiene un diamente en bruto en su dorsal 10, Alessio Riccardi, pero poco más.

El Juvenil A del Real Madrid necesitaba no perder por 3-0, o por resultados mayores de tres goles si conseguía marcar, en su visita a Roma, para asegurar el primer puesto. Y pese a las rotaciones de un Poyatos que dejó en Madrid a todos los castillistas salvo a Alberto, las dudas se disiparon muy pronto. Porque con un Miguel Baeza encendido en el arranque de partido, Gila, tras asistencia del cordobés, y Rodrigo Rodrigues, con un sensacional penúltimo pase del 10 madridista (el último lo dio Marvin) dejaron el marcador en 0-2 en los primeros nueve minutos de partido. Si alguien buscaba un susto para el Juvenil A del Real Madrid, aquello no iba a pasar.

Los dos goles blancos, no podía ser de otra manera, escocieron y mucho al equipo de Giuseppe de Rossi, que apoyándose en Riccardi, un jugador que tiene una pinta magnífica, comenzó a rondar a Altube. Y bien que lo hizo, pero las limitaciones de su delantero centro, Bucri, quien perdió tres ocasiones clarísimas, impidieron que hubiera partido. Más aún cuando Miguel Gutiérrez, tras un pase a la espalda de la zaga romanista sensacional de Víctor Chust, hizo el 0-3. El primer puesto de grupo estaba aseguradísimo, porque los locales necesitaban siete goles para apurar a los blancos.

Siete no hicieron, claro. Pero sí uno, en una contra de manual que anotó Riccardi, y se dejaron por el camino una serie de oportunidades clamorosas desperdiciadas, sobre todo a la contra: los de Poyatos se relajaron en exceso y permitían que los giallorossi les cogieran con la guarda baja en demasiadas oportunidades. Sin embargo, y mientras el Juvenil A perdía varias ocasiones claras por la mala fortuna de Baeza en el remate, Rodrigo cazó un pase de Alberto tras buena jugada del castillista por la derecha y el 1-4 subió al marcador. Allí ya no había nada que rascar, o eso parecía. Porque Pedro, suplente, aprovechó los 17 minutos de los que dispuso para marcar dos goles mostrando su voracidad, y el sevillano necesita goles. Los octavos estaban en el bote y se evita, definitivamente, la ronda previa.