RMB – PAN Comienza el espectáculo

El Panathinaikos vuelve a enfrentarse al Real Madrid en busca de un billete para la Final Four de Vitoria. Calathes es su verdadero motor y el Madrid deberá emplearse a fondo a pesar de la baja de Llull

0
-publicidad-

El Madrid recibe por 2º año consecutivo al Panathinaikos griego en la eliminatoria de cuartos de final de la Euroliga que da el billete para la Final Four de Vitoria 2019. Las fechas son el 17, 19, 23, 25 y 30 de abril. Los dos últimos serán innecesarios si hay un equipo que consigue ganar 3-0 en la eliminatoria.

Los de Laso, ya se sabe, cuentan con la ausencia de Llull que será importante. Evidentemente no había vuelto a tener la forma física de antaño pero su liderazgo es incuestionable y el Madrid tendrá que sobreponerse a ello. Los de Rick Pitino es casi seguro que tendrán la baja de Gist. Todo un portento físico que también acusarán los verdes.

El Madrid llega teniendo cierta irregularidad mientras que el Panathinaikos llega en un estado de forma envidiable. 7 triunfos en 8 partidos. Motivos hay para la esperanza, la única derrota griega fue la producida ante el Madrid. Ciertamente fue por un triplazo de Rudy muy afortunado pero los blancos compitieron y estuvieron ahí en una de las canchas más complicadas de Europa.

¿Será suficiente para llevarse la eliminatoria? Difícil respuesta. A pesar de que el rendimiento de algunos jugadores como Campazzo está siendo irregular, quizá por la cantidad de minutos jugados, hay otros jugadores que sí están dando un paso adelante como son Randolph, Tavares y un renacido Rudy. La clave obviamente pasa por anular el factor Calathes. Un todoterreno, capaz de conseguir un triple doble con relativa facilidad. Si se consigue rebajar la importancia del internacional griego la producción del resto del equipo bajará. El mencionado Campazzo y Taylor serán fundamentales para defender al internacional griego. Papagiannis será otro obstáculo y Tavares y Ayón deberán trabajar defensivamente en ello.

Es importantísimo empezar con buen pie y no confiarse para nada. Ya se sabe que los griegos darán guerra y alargar la eliminatoria no es una buena idea precisamente.

Compartir
Madridista desde pequeñito, solo podía ser seguidor del mejor equipo del mundo; bastantes desgracias tiene la vida como para llorar por el deporte y ser fan de un equipo perdedor. Como lo mío no era precisamente ganarme las habichuelas jugando al baloncesto, decidí que lo mejor era verlo desde el otro lado de la barrera, y qué mejor forma que narrar los éxitos del Real Madrid de baloncesto. Mis referentes ligados a este deporte, sin lugar a dudas, han sido la plata olímpica de los Ángeles 84, el colegio San Viator (de donde salieron gigantes como Juan Antonio Corbalán y Carlos Jiménez) y mis hermanos mayores. Después de varios trabajos y alguna estancia en Irlanda decidí sentar la cabeza y ahora presto el mejor servicio al ciudadano desde mi posición de funcionario de la Comunidad de Madrid. No cuajó la opción de ser coordinador de cheerleaders, pero os dejo una foto ellas para que veáis que al menos lo intenté...