RM 2 – 2 SEV: Kroos amarra al Madrid a LaLiga

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Lo cantaba Julio Iglesias: la vida sigue igual. Y LaLiga también. En la jornada que iba a decidir todo, con enfrentamientos entre los cuatro primeros, no se decidió nada. LaLiga, decimos, sigue igual. Un Madrid sin sangre que tardó 45 minuto en enterarse de qué iba la vaina. Una mano involuntaria que sólo se señala con VAR y que se pitan sobre todo contra el equipo que más quería que hubiera VAR. Y un gol en el alargue, milagroso, tras rebote en Hazard, de Kroos, que permite al Madrid empatar en el minuto 94 (2-2) y seguir con opciones reales en el campeonato. Pero LaLiga estará marcada por la jugada del penalti a Benzema que no se pitó porque se pitó un penalti previo por manos de Militao. La polémica de todas LasLigas.

El Madrid, como entidad, debería hacerse mirar si tiene que fichar jugadores que vendan camisetas o, por el contrario, jugadores que aporten carácter. O un mix de ambos. Ante el Sevilla, hasta en Las Batuecas sabían que el Madrid necesitaba ganar sí o sí para meterse LaLiga en el zurrón a tres jornadas del final, pero por lo visto sus jugadores no lo entendieron así. El equipo, fundido físicamente, no tuvo un ápice de intensidad, más allá de las cabalgadas descabezadas de Vinicius.

Zidane optó por meter a Valverde arriba, en el 4-3-3, condenando a Hazard al banquillo, pero el Pajarito está bajísimo de físico a causa del COVID, así que su presencia pasó inadvertida. El Sevilla salió a mandar sobre el Di Stéfano, y su puesta en escena fue excelente, acogotando al Madrid y monopolizando el balón. Pero sin embargo, la primera llegada del Madri fue gol… anulado, por un pie y de Odrizola, quien metió el centro para que Benzema anotara.

El gol anulado, contrariamente a lo que se debía suponer, espoléo al Madrid y dejó muy tocado al Sevilla. Kroos y Modric vivieron un paréntesis de diez minutos donde el oxígeno les regaba la musculatura de manera habitual, pero sin embargo, y como sucedió en el arranque, esta vez fueron los de Lopetegui los que marcaron, y esta vez no se lo anularon pese a que la jugada nació de una falta inexistente de Casemiro a Jordán. Fernando hacía el 0-1 y el Madrid, hasta el descanso, fue un fantasma sobre el campo, aunque el Sevilla ya nadaba y guardaba la ropa.

Era imposible ponerle menos ganas, menos intensidad, que en el primer tiempo, así que los de Zidane decidieron ir a por el partido en cuanto volvieron de vestuarios. Kroos tomó las riendas y el Sevilla se tiró tan atrás que un poco más y se toma unos caracoles en El Tremendo, y eso que el partido se jugaba en Valdebebas. Así que Asensio empató nada más entrar al campo, tras un genial pase de Kroos que el balear si aprovechó. Un minuto antes, Vinicius falló un remate de esos de recopilación de errores de final de año, también a centro del alemán.

Y llegó la jugada de la polémica. Córner a favor del Sevilla, el Madrid despeja, contra velocísima del Madrid y Benzema es derribado por Bono dentro del área sevillista cuando encaraba mano a mano y había regateado al portero marroquí. ¿Penalti para los blancos? No. Porque en el córner, Militao saltó de espaldas con los brazos extendidos y el balón impactó en su mano. En el fútbol normal eso es mano involuntaria. En el del VAR, es penalti. Rakitic no falló el lanzamiento y puso de nuevo la Liga cuesta arriba para los blancos, con trece minutos para acabar el encuentro.

El Madrid se desconectó, pero en el mágico minuto 94 Kroos atinó a hacer el 2-2, un gol con aroma a Clavo Ardiendo y que además rebotó en un Hazard que pasaba por allí, y en el 96 Casemiro estuvo a punto de remontarlo. Al final, la jornada que iba a decidir todo no ha decidido nada. Quedan tres jornada y todo sigue igual, hay una Liga por decidir, una Liga a la que Kroos amarró al Madrid.

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Yo vi jugar a Del Bosque, así que llevo unos cuantos años yendo al Bernabéu. Socio desde 1986, mis recuerdos van ligados al Madrid del Di Stéfano entrenador, el de los cinco subcampeonatos, que me forjó en madridismo ante los malos tiempos, y al de la Quinta del Buitre, la poesía y las pelotas hechas fútbol. Desde 1996 dando la barrila en esto del periodismo deportivo, aunque hace años que es mi hobbie y no mi profesión.