Ernest Renan apuntaba que "el primer elemento de la libertad individual es la libertad de expresión, el derecho a expresar y comunicar ideas, de distinguirnos de las bestias irracionales del campo y el bosque". Eso, desde aquí, lo llevamos a rajatabla. Muchos de vosotros no cesáis de criticar a los medios de comunicación (me da igual el bando al que pertenezcas y por tanto defiendas: el de enfrente son los malos porque en este país todo se ha futbolizado, no sólo las transmisiones de F1 que tanto enervan a Manolo Matamoros) por seguir una línea editorial, la línea pastoral del centro según Richard Dees. Aquí la línea editorial no existe: cada cual escribe lo que le apetece, como le da la gana y empleando los términos que sea capaz de manejar, cada uno (se supone) ha recibido la mejor educación que sus padres pudieron darle. Y lo hago porque no quiero convertirme en uno de ellos, en un vocero de una única forma de pensar. Para eso ya tenéis mil sitios donde esparciros.
¿Que yo tengo mis tics, mis dejes, mis querencias? Por supuesto, pero aunque tenga físico de búcaro no soy un búcaro, ni siquiera me han hecho las orejas de cerámica. Todas esas opiniones son mías, no de los demás, ni tampoco espero que nadie más las comparta. Los demás pueden revolverse como jabatos si les place y descuajaringar el tenderete.
Sí, Alfredo Duro seguirá escribiendo aquí mientras él quiera. Y de lo que él quiera. Y con la frecuencia que quiera. Diciendo lo que quiera en los términos que quiera. Sin ninguna cortapisa. Sin tener que seguir mi forma de pensar porque aquí eso tiene correspondencia con las líneas 3 y 6, tan soterrado que no da señales de vida. Los que decidís si merece la pena leerle o no, los que le pondréis a caer de un burro o le elevaréis a los altares sois vosotros. Pero en SoyMadridista las ventanas están abiertas siempre, aunque el vigor de la brisa mañanera a alguno le despeine el tupé.
Mañana, a primera hora, a Duro le he pedido que me dé su opinión sobre la titularidad de Casillas en Estambul, anunciada hoy por Ancelotti. Ya tengo escrita la mía. No sé por qué me da que vamos a chocar en bastantes cosas. Duro no ha recibido ninguna instrucción, ni siquiera le he recomendado que acelere el compás en el "topo, topo, topo, el topór, el topór, el topór" para poder sacar un remix discotequero y retirarnos del periodismo luciendo una gorra beisbolera con la visera para atrás y la marca de los calzoncillos por encima del vaquero. Escribirá lo que le venga en gana. Y yo, por supuesto, también. Lo jodido sería que coincidiéramos. ¿O no, Duro?