Sábado funesto para los filiales del Real Madrid, si bien prácticamente toda la cantera siguió la senda del Benjamín A ganando sus partidos de hoy (Benjamín B e Infantil B empataron), tanto el Juvenil A como el Castilla cayeron derrotados en sus encuentros. La buena noticia es que los dos filiales dieron en todo momento muestra de querer, y más importante, ser capaces competir con el marcador adverso.
El Castilla se enfrentó a un aguerrido Fuenlabrada que hizo gol gracias a una genialidad ofensiva, y a partir de ese momento, se encerró casi en su totalidad. Lejos de tembleques y miedos, el equipo de Santiago Solari inició un monólogo lleno de fútbol y personalidad pero en que faltó el gol que otras jornadas se encontraba con más facilidad. Ayudó el colegiado que no vio un claro penalti sobre Dani Gómez en los últimas instantes del encuentro, pero los blancos no lograron solventar la problemática. Termina así la racha de más de seis meses invicto para el segundo equipo del Real Madrid. La imagen a pesar de ello, fue la de un equipo que no se rinde y jamás deja de competir.
El Juvenil A tuvo la misma mala fortuna pero con la dificultad añadida de jugar fuera de casa, en un campo tan duro como el del Aravaca, y contar con un jugador menos desde el minuto 6 por expulsión de Pedro Ruíz. A pesar de ellos, el equipo tampoco dejó de competir aunque volviese de vacío.
Si bien este no ha sido el mejor fin de semana de cantera, hay motivos para seguir creyendo en nuestros filiales. Si no solamente compiten cuando las cosas van bien, sino que lo hacen también cuando van mal dadas, el futuro se muestra esperanzador.