CAS 3 – 1 CAR: El Castilla se apunta a un Master

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El Castilla se hizo mayor de edad ante el Cartagena. Los Cachorros blancos derrotaron al Efesé (3-1) y dieron un paso muy importante en sus aspiraciones de superar esta primera ronda de los playoffs de ascenso a Segunda, aunque queda mucha tela que cortar todavía. Dos goles y una asistencia de Dani Gómez y un gol y un pase de gol de Cristo impulsaron a los de Manolo Díaz en un día clave.

El encuentro fue un Master acelerado para una generación de Cachorros que, por lo que fuera, no había tenido oportunidad de disputar partidos de una promoción de ascenso. Comenzaron avasallados por un Cartagena superlativo, encontraron su espacio a partir del cuarto de hora, desmadejaron al rival en diez minutos fabulosos marcando tres goles y luego impidieron que volviera a pasar absolutamente nada sobre el césped, como hubiera hecho un equipo curtido en mil batallas y plagado de veteranos. Y cuando todo parecía finiquitado, con un resultado rotundo en el marcador, Jara anotó en la primera y única ocasión visitante, con el equipo cartagenero en inferioridad, y elevó la intranquilidad para la vuelta, para el examen final del postgrado.

El partido fue una apoteósis. Los de Munúa saltaron al campo demostrando que son un equipazo: presión adelantada, aliento en el cogote del rival, defensa de tres que impedía cualquier resquicio para que Cristo o De Frutos encontraran espacios… Luca Zidane no sufría, pero sólo se jugaba en su frontal. Hasta que Fidalgo y Seoane se colocaron al lado de Calderón para darle salida al juego blanco. Primero poco a poco, aguantando al menos algo el balón. Y luego, encontrando cómo descerrajar velocísimos contraataques aprovechando los laterales largos del Efesé.

Tres goles en once minutos tremendos. Los dos primeros de Dani Gómez, tras un enorme pase de Cristo y una galopada furibunda de De Frutos. El tercero, de Cristo, en otra contra que fue basculando de derecha a izquierda hasta que el tinerfeño fusiló a Joao Costa llevando el delirio a las gradas del Di Stéfano.

No puede contarse mucho del segundo tiempo. El Castilla aplicó varias vendas compresivas bien frías sobre el partido, que acabó casi congelado. Bien colocado, ordenado sin dejar espacios a un Cartagena que no se rindió jamás pese a quedarse con diez en el tramo final del encuentro, no sufrió nada mientras Javi Sánchez iba aumentando su presencia en el encuentro de manera exponencial. El defensa canterano dio un clínic.

Pero cuando acababa el partido, un precioso pase de cuchara de Cordero encontró a Santi Jara justo a la espalda de Javi Sánchez. Su primer remate lo sacó Luca Zidane, pero el rechace le volvió a caer al centrocampista del Submarino y llevó al marcador un 3-1 que es peligroso. En una semana, a los de Manolo Díaz les tocará intentar graduarse en Cartagena. El examen más duro, pero con 3-1 no se viaja tan mal.