El derbi madrileño fue un calco al emparejamiento de Copa del Rey. Desde el primer cuarto, el Madrid abrió brecha gracias a su porcentaje de tres. Nuevamente Campazzo fue el mejor del partido bien apoyado por Taylor, Rudy, Ayón o Tavares. Por los de Serrano, solo Gentile y Caner-Medley dieron la talla y se acercan peligrosamente a la LEB. El sábado próximo partido en Zaragoza siendo líderes provisionales de liga. Buen partido de Llull que mostró una evidente recuperación a una semana del decisivo enfrentamiento contra el CSKA.
Sorprendía Laso colocando a Taylor sobre Cook y a Campazzo sobre Clavell. Los visitantes salieron fuertes liderados por Caner Medley que se multiplicaba en ambas partes de la cancha (7-7 minuto 3) pero el Madrid no se descompuso. Con Campazzo como general en pista el juego fluía y sobresalía Taylor como abrelatas. El triple madridista compensaba la buena actuación de Caner Medley durante los primeros minutos (18-12 minuto 7). Mientras tanto Tavares iba dejando muestras de fortaleza defensiva y aterrorizando a rivales con sus tapones. Los triples iban abriendo brecha para los blancos (6/8 en el primer cuarto) y los de Ramiro se veían incapaces de parar la sangría con el 27-14 en el luminoso. La entrada de Gentile (6 puntos nada más entrar) no logra darle el revulsivo necesario ya que pasados los primeros 10 minutos el marcador señalaba un 30-18.
Los blancos seguían martilleando el aro rival a base de triples con un gran 10/16 con 15 minutos jugados. A pesar del sufrimiento de Carroll defendiendo a Etou, la segunda unidad de Laso se puso las pilas nada más entrar en cancha. El mencionado Carroll, Ayón y la mejor noticia para la parroquia madridista, la recuperación de Llull lograban llegar a la máxima ventaja blanca (42-22 minuto 14). Gentile mientras tanto, se encontraba muy solo por los visitantes. Al descanso seguía el festival blanco con el 55 a 38 y muchos problemas para el eterno rival si quería llevarse un necesitado triunfo. Caner-Medley y Gentile con 10 puntos cada uno eran los mejores. Por el Madrid, habían jugado 11 hombres de Laso y 10 habían anotado puntos.
A la vuelta de los vestuarios, el Madrid con el ritmo impuesto por el argentino Campazzo seguía a lo suyo. Era una continua alegría ofensiva. La desventaja estudiantes no bajó de los 16 puntos a pesar de los continuos esfuerzos de Gentile. En el engranaje de Laso todo funcionaba. Junto con Campazzo, Taylor y Rudy junto con Tavares aportaban a la causa blanca. A los de Ramiro se les empezaba a hacer muy largo el partido y quedaba todavía más de un cuarto (76-54 minuto 27). Tras otra fabulosa asistencia de Campazzo a Ayón se terminaba el período con el 84 a 61 (aunque el partido había acabado hacía varios minutos). De ahí al final del partido el Madrid se las arregló para no pasar apuros y meter a la vez en más problemas al eterno rival capitalino.