Al Madrid le dieron un baño de realidad, y tuvo que ser en California, dónde si no. El Manchester City trituró al equipo de Zidane y para ello no necesitó siquiera hacer un partido excelente, sino simplemente aprovechar los errores cometidos por el equipo madridista, muy desajustado aún a estas alturas de pretemporada y, lo que es peor, con una falta de orgullo preocupante. Fue 4-1, aunque ambos equipos pudieron hacer más goles. Con dos partidos de pretemporada ya disputados, y a falta de otros tantos antes de que se disputen los primeros títulos oficiales del curso, la cosa comienza a ser cuanto menos levemente preocupante.
Cinco goles encajados y uno marcado en los dos partidos. Sin Cristiano (y sin Morata, podría ser, dado que ya no está), el Madrid no tiene gol. Benzema le vendrá muy bien a Ronaldo, pero si el luso no está su utilidad queda en entredicho. Bale un ramillete de buenas acciones ante un rival Premier, aunque tampoco será jamás un jugador de 30 goles por temporada. E Isco, que actuó de enganche a la vieja usanza, demostró lo buenísimo que es y el poco fuelle que tiene en julio.
Para colmo de males, el Madrid anduvo horrible en defensa. Carvajal, a quien siempre le cuesta horrores arrancar motores, fue un desastre. Varane y Nacho se descolocaron tantas veces que se perdió la cuenta. Y Marcelo dejó libre una autopista en su costado que el City supo explotar. Casemiro no puede sujetar solo el centro del campo, y Modric ya no es un chaval: en julio no tiene físico para volver en el ochenta por ciento de ocasiones. Kovacic, que jugó por el lesionado Kroos, da lo que puede, pero cuando el rival, como hizo Guardiola de arranque, alinea cinco medios y el Madrid está en inferioridad, el centro del campo del Madrid hace aguas.
Así que el Madrid lo pasó muy mal, realmente mal, desde el inicio. Keylor Navas fue el héroe de la primera mitad con tres muy buenas paradas, justo antes de que Zidane deshiciera el 4-3-1-2 de inicio para con un 4-5-1 compensar la inferioridad blanca en el medio. Entonces el Madrid fue superior pero el poste primero, a cabezazo de Casemiro, y luego Ederson, con una buena mano, evitaron que los blancos se adelantaran. Al descanso la cosa iba 0-0, pero…
Pero el segundo tiempo fue un cataclismo. Marcó Otamendi nada más comenzar, aprovechando un rechace en jugada a balón parado, y el Madrid se desmadejó. Cada llegada del City era un huy (dos palos) y casi casi gol. Ni la entrada en escena de los Sub-21 y los canteranos (debutaron Vallejo, Ceballos y Marcos Llorente) sirvió para detener la sangría, aunque Mayoral, Vallejo y Achraf dispusieron de ocasiones para maquillar el resultado. Pero sólo Óscar, demostrando el guante de seda que tiene en las botas, encontró puerta. Y el Madrid, este Madrid sin gol, se llevó un rapapolvo de Los Ángeles de los que hacía años que no se recuerdan.
La ficha del partido
4 – Manchester City: Ederson; Stones, Kompany, Otamendi; Danilo, Foden, Yaya Toure, De Bruyne, Walker; Gabriel Jesús y Agüero. También jugaron Sterling, Mangala, Nasri, Zinchenko, Díaz y Duhaney
1 – Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal, Varane, Nacho, Marcelo; Modric, Casemiro, Kovacic; Isco, Benzema y Bale. También jugaron: Casilla, Achraf, Vallejo, Theo, Marcos Llorente, Vallejo, Óscar, Lucas Vázquez, Tejero, Asensio y Mayoral
Goles: 1-0 (52′): Otamendi. 2-0 (59′): Sterling. 3-0 (67′): Stones. 4-0 (82′): Díaz. 4-1 (90′): Óscar.
Árbitro: Baldomero Toledo, de California. Amonestó a Yaya Toure (29′), Nacho (33′) y Carvajal (41′)
Incidencias: Memorial Coliseum de Los Ángeles. 93.098 espectadores.
